
- Revisar el cifrado de extremo a extremo en la sincronización o el aislamiento de procesos, debemos prestar atención a los avisos sobre sitios inseguros.
- Las contraseñas seguras cuentan con un mínimo de 8 caracteres y contienen al menos una mayúscula, números y caracteres especiales con el fin de evitar el robo de información confidencial y datos personales.
- Hay que proteger el acceso al móvil con una contraseña o reconocimiento facial. Y si vamos a perder de vista nuestro dispositivo por un tiempo, por llevarlo a reparar, por ejemplo, conviene hacer copias de seguridad y restaurarlo con los valores de fábrica. Respecto a las apps que nos descargamos, debemos revisar sus términos antes de aceptarlas, ya que, sin darnos cuenta, podemos estar dando un permiso de acceso a información personal o a nuestros datos. Asimismo, debemos comprobar cuál es el grado de privacidad de las redes sociales que utilizamos y nunca aceptar solicitudes de amistad procedentes de extraños.
- Las diferentes actualizaciones del sistema operativo, paquetes de Office, navegadores, complementos, aplicaciones y programas suelen incluir parches de seguridad y nos ayudan a estar protegidos, por lo que conviene tener siempre la última versión disponible.